lunes, 24 de marzo de 2008

Siempre hueles rico.

Que lindo fue pretender que nomas habia un "tu" y un "yo" estos poquitos dias fuera del hogar.
Mi maleta estaba tan llena que ya no cabian las inseguridades (aparte que ni las queria llevar), mucho menos habia espacio para esos pensamientos poco agradables.
Llegué a mi bonito hogar y recorde que no solo existia un "yo". No se si estoy siendo hoy algo directa pero tu sabes que escribir es mi mejor terapia.
Me gusta mucho sentirte cerca de ti, pego mi cabeza a la tuya para ver si puedo escuchar un poco de lo que piensas y responder esa pregunta que siempre tengo en la punta de la lengua (es por eso que siempre te abrazo tanto) pero que nunca puedo hacer, es una pregunta sencilla la unica que necesito saber para entender que todo esta bien y pego mi cabeza fuerte fuerte para ver si la puedes escuchar y me la puedas responder, si quieres en voz bajita, escrito, o en una voz muy muy alta.
Y ya mejor ni reviso la ortografia ni le doy otra leida para ver si se entienden mis ideas, por que despues me arrepiento y lo borro.

FUFF.

1 comentarios:

Javier dijo...

Que bueno que no llevaste tus inseguridades, siempre hacen mal tercio.

Pegare mas fuerte mi cabeza contra la tuya ara escucharte.